Espectacular propiedad modernista restaurada, cituado en la cuarta planta de una finca que data del 1930.
La propiedad se localiza en pleno centro de la ciudad a una calle del prestigioso Passeig de Gràcia. Pertenece al entorno protegido de edificios situados en el Sector de conservación del Eixample, lo que garantiza la conservación de la zona i los edificios que lo
configuran.
Su céntrica ubicación permite disfrutar de todas las posibilidades que ofrece nuestra ciudad, así como de excelentes comunicaciones por transporte público.
Se trata de un piso pasante, con luz por ambos extremos y orientado por un lado a la calle y por el otro a un tranquilo patio de manzana con una gran galería.
Esta vivienda se vende reformad a estrenar, con elementos modernistas de la época.
Se han combinado, con un gusto exquisito, los materiales nuevos y los elementos originales que la propiedad conservaba.
La zona de día orienta a la calle, cocina abierta que da paso a un amplio y luminoso salón con tres balcones exteriores. La propiedad dispone de 2 dormitorios y una gran master suite con una gran galería que está orientada a un tranquilo patio de manzana.
Vivienda con rasgos modernistas y personalidad única
El emplazamiento en el que se encuentra el edificio, está incluido en el catálogo de patrimonio del Ayuntamiento de Barcelona. Una finca regia de estilo noucentista, edificada según los cánones de finales de siglo XIX a principios del XX. Se trata de una construcción tradicional que mantiene todos los rasgos característicos de la época: estructura principal de muros de carga de ladrillo macizo, especialmente gruesos en las fachadas, subestructura de vigas
unidireccionales de madera con entrevigado de bovedilla cerámica para la formación de los forjados y pavimento Nolla, dotando así a la vivienda de una personalidad única. El edificio se ubica en una parcela entre medianeras y adopta la forma tradicional del Eixample de Barcelona, con viviendas pasantes con
ventilación directa por la fachada principal por donde se produce el acceso a la finca y la fachada interior de manzana, además de los patios interiores de instalaciones.
La fachada principal, la de la calle Pau Claris, destaca por su simetría y regularidad compositiva propia de la época. Las aberturas se sobreponen en estricta alineación vertical, todas ellas enmarcadas por una pequeña moldura en su perímetro y culminadas en la parte superior por las ménsulas que simulan soportar los balcones superiores. Estos balcones, empotrados en la misma fachada, se rematan con trabajadas barandillas de hierro forjado. La fachada interior, en cambio, destaca por su galería, espacio más permeable, que debido a sus características constructivas grandes ventanales ya su orientación, es capaz de proporcionar una estancia interior confortable y luminosa.
La planta alargada de la vivienda se compone por un pasillo principal que organiza los espacios del piso. El frente de fachada a calle Pau Claris se reserva por la zona de día, siendo ésta la de mayor amplitud, mientras que la habitación suite principal, se sitúa en el extremo opuesto, vertido en el interior de manzana, priorizando así , la tranquilidad y el descanso.
El resto de piezas de la vivienda se dispone a lo largo del pasillo, ventilando por los mismos patios interiores de la finca.